25 jun 2010

After, before.. and ¿now?

Uno de los sentimientos más difíciles de reconocer es el perdón a nosotros mismos.
No negarnos a nuestra autoestima. Negarse a la propia belleza de uno mismo, dar todo por los demás y de a poco ir presionando el botón de autodestrucción.
¿Quién es capaz de ganar una batalla cuando se ingresa perdiendo al campo de batalla? Clama esa bronca, ese dolor.
Cuando uno es náufrago, no encuentra su camino de vuelta, solo ve aguas. Días tormentosos, huracanados. Días que queman de lo brillantes. No se llega a divisar la manera de sobrepasar la situación.
Mi prójimo, mi templo ¿mi salvación? Vivimos en un mundo con incontables bullicios que provienen de cuerdas vocales, propagan odio, propagan desesperación, propagan paz, propagan ansiedad. Pero ¿quién soy?, ¿quién creo ser? Los demás delante de mi ser, ¿quién cuidará de mí?
No llegué a conformar. Uno de los sentimientos más difíciles de reconocer es el perdón a nosotros mismos. ¿Estás dispuesto a cambiar? Estás dispuesto para una vez más batallar? ¿Preparado para construir un muro ante la infelicidad?


Agustina

No hay comentarios.: